Los Salvatorianos tienen 65 años de historia en la República Democrática del Congo. Nuestros cohermanos, implicados en diferentes lugares a menudo separados por distancia enormes, están cerca de los más pobres y vulnerables de cada comunidad en la que viven y trabajan. A lo largo de los años han conseguido construir unas relaciones buenas y fiables con los agentes y autoridades locales así como detectar las necesidades más urgentes – y a menudo muy básicas – de la población.
Con la construcción y la gestión de un complejo escolar en la zona urbana de Bel-Air, los Salvatorianos respondían a una necesidad que la población local sentía y expresaba profundamente que además estaba en la línea de la estrategia de cinco pilares del gobierno, uno de los cuales es la sanidad y la educación.
Bel-Air es un distrito de alta densidad de población de Lubumbashi, la segunda ciudad más grande de la R.D. del Congo. De los más de 60.000 habitantes de Bel-Air, casi un tercio son niños entre cinco y 14 años. No obstante, sólo hay cinco escuelas primarias en el distrito y todas tienen problemas de capacidad y calidad. La mayoría de los padres y madres no tienen dinero suficiente para pagar el transporte público necesario para enviar a sus hijos/as a un colegio en un barrio vecino y acudir andando supone demasiada distancia y demasiado peligro. A consecuencia de ello, hay muchos niños/as que no reciben educación primaria de ningún tipo - ya ni hablemos de la educación secundaria.
Con el apoyo de SOFIA, cuya aportación en lo que respecta al desarrollo del proyecto, la recaudación de fondos y la ejecución del proyecto fue muy útil, los Salvatorianos empezaron con un centro de educación infantil, que se terminó en 2012. Posteriormente, se lanzaron a construir un colegio nuevo de enseñanza primaria en el mismo complejo, que han bautizado Wokovu – la palabra kiswahili para Salvación.
El colegio de educación primaria pudo ya recibir a los primeros 382 niños/as en 2013. Dada la gran necesidad y afluencia de todas partes de Bel-Air, en 2013 2014 se construyeron ocho aulas adicionales. Durante el curso escolar 2014 2015, el número de alumnos/as llegó a 715 (370 chicos y 345 chicas), una cifra importante si se tiene en cuenta que se suele dejar en casa a las niñas cuando las familias tienen que decidir a cuál de sus hijos/as mandar al colegio). En septiembre de 2015, se introdujo el 6º curso, en el hoy hay matriculados 925 niños/as. También el número de “clientes” de Educación Infantil crece constantemente (de 468 matrículas en 2014 2015 a las actuales 540).
Al margen de las cifras, aunque por ahora el colegio de educación primaria no lleva funcionando más de tres generaciones, ya ha conseguido un impacto considerable:
- En Lubumbashi, 800 niños/as más reciben educación primaria y, según los datos del curso 2016-2017, 100 niños/as por año podrán pasar a un centro de educación secundaria.
- Igualdad de oportunidades para niños y niñas: El 45% del alumnado que terminará la educación primaria en Wokovu serán niñas.
- Unas infraestructuras adecuadas, un profesorado bien seleccionado y una buena dirección bajo supervisión salvatoriana permiten que la escuela Wokovu garantice una educación de calidad.
- Los padres y madres están encantados de que sus hijos/as puedan seguir aprendiendo y desarrollando capacidades y valores después de la educación infantil y de no tener ya que mandar a sus hijos/as a centros de primaria lejanos o que funcionan mal. Entre otras cosas, les da tranquilidad y tiempo extra para dedicarse a la educación de sus hijos/as y a trabajar.
- En general, el nuevo centro de primaria contribuye al desarrollo socioeconómico y humano de la zona. El colegio mejora la cohesión social gracias al intercambio diario entre adultos/as y niños/as y gracias al hecho de que más niños/as terminarán una buena educación primaria en la que se presta especial atención al desarrollo y refuerzo de valores cívicos y morales.
- También se apoyan iniciativas solidarias de la comunidad local en favor de los más pobres entre los pobres, como la recogida de ropa organizada por los padres/madres para los niños/as más necesitados de Lubumbashi.
